Como el Espejo

 

Quisiera ser tu almohada

para compartir todos tus sueños,

contemplar tu rostro por la madrugada,

conocer tus anhelos grandes y pequeños.

Ser como el sol quisiera,

para acariciar cada parte de tu ser,

y encender en ti la hoguera

donde nuestra pasión pudiese arder.

Por ti siento celos hasta del agua,

porque puede acariciar tus labios,

y viajar por cada parte de tu ser,

tu ausencia me estantigua,

mis pensamientos se emancipan en disturbios,

dudando si algún día me llegaras a querer.

Quisiera ser el dueño de tus pensamientos,

encontrar cobijo en tu corazón,

ser parte de tus sentimientos,

en donde no gobierna la razón.

Sin embargo, no soy agua ni fuego,

tan solo un simple poeta soñador,

que paso de lobo a borrego,

con tal de conseguir de ti una pizca de amor.

Me pierdo en tu indiferencia,

con tu desdén me mantienes alejado,

me haces sentir el frio de la ausencia,

mantienes mi corazón acongojado.

Te presentas de forma desafiante,

sabiendo que ante ti perdí la armadura,

tu desdén lo conviertes en un arma cortante,

que hiere y cuarta mi cordura.

Y aunque eres la musa de inspiración,

también la fuente de mis pesares,

hay días que me llenas de ilusión,

pero otros solo me causas congojares.

Me regalas momentos tiernos y llenos de dulzura,

en donde simplemente no cabe la confusión,

tiempo en la que eres bondad, eres la ternura,

que cautivo mi lerdo corazón.

Pero después te conviertes en incertidumbres,

te llenas de falacias e inseguridades,

sin piedad me causas pesadumbres,

infantilmente te cubres de ambigüedades.

Tendré que aprender a ser como el espejo

a resguardarme para no salir dañado,

de tus actitudes ser fiel reflejo,

para no quedar en tus redes atrapado.

Aceptar que tan solo soy otro que a caído,

un loco que todo a tergiversado,

que la amistad a confundido (¡aja!)

valorar todo aquello que tu has desdeñado.

Starlight